
El día en que se rompan todos los silencios
y las palabras no sean mas que el eco de mi voz
El día en que las lagrimas de un dulce beso
Ya no limpien las heridas de un corazón
El día en que mis manos estén lejos
Y las caricias vaguen solas bajo el sol
El día en que la rabia y la pena no se abrasen
Y vivan solas, en distinta habitación
El día en que un no tengas ganas de intentarlo
Y nos dejes castigados en un rincón
Ese día que puede ser hoy o mañana
Hace un siglo o el día que quiera Dios
Te seguiré amando como el primer día
Como siempre, como solo lo se yo.
Manuel Alejandro
Bueno aunque no es una despedida para siempre, estare ausente por un buen rato, mi montaña rusa, llego hasta aqui nomas, se cierra hasta nuevo aviso, aunque extraoficialmente se dice que es para siempre, gracias a todos los que escribieron algo respecto a mis poemas o cuentos, gracias por sus comentarios y opiniones.
Espero volver a publicar algo cuando este triste corazon sane algo sus heridas.
Afectuosamente para todos.
Manuel Alejandro Maraboli